CortesíaLas autoridades adelantan la búsqueda del asesino del menor. Familiares y amigos claman por justicia.

Mientras la mayoría de los carmeros se divertían en las fiestas de pre carnavales que se realizaban en el parque principal de El Carmen de Bolívar, un grupo de jóvenes (pandilleros), esperaban a Alexander Ochoa Vargas para asesinarlo.El joven, de 16 años, perdió la vida el pasado viernes, a las 10 de la noche, a pocos metros del centro del municipio, cuando un grupo de jóvenes, al parecer, lo atacó con un destornillador, ocasionándole una herida a la altura del pecho, muy cerca del corazón.

Los familiares del muchacho se enteraron de lo ocurrido media hora después, cuando algunos amigos de Ochoa Vargas le contaron la mala noticia a uno de sus hermanos, que se encontraba en el festejo, a pocos metros de donde fue atacado el menor.

“Estaba al otro lado del parque donde estaba mi hermano, y cada rato venía a ver qué estaba haciendo, cuando de repente todo el mundo comenzó a mirarme de una forma distinta y alguien me dijo lo que había pasado, hice una llamada telefónica y me lo confirmaron”, cuenta un hermano de la víctima.

Alexander Ochoa Vargas terminó  el bachillerato el año pasado en Santa Marta, ciudad a donde lo mandaron sus padres por un problema que había tenido con unos jóvenes que lo golpearon hace más de un año.

“Mi hermano no era un niño atrevido, no le gustaba andar en grupo, pero se hacía respetar en todo momento y no permitía que nadie lo maltratara, por eso fue que la vez que tuvo el problema con los muchachos que lo golpearon se defendió y le pego en el rostro a uno de ellos con una piedra”, dijo.

Contó que tan pronto su hermano resultó herido, varias personas que se encontraban cerca al sitio de los hechos lo atendieron, y lo llevaron hasta el hospital en una motocicleta, pero que al llegar sus signos vitales eran escasos, razón por la cual poco pudieron hacer los médicos.

“Nosotros estábamos en el parque cuando de repente se le metió el afán por irse, me pidió una corneta que tenía desde tempranas horas, y cuando nos enteramos ya lo habían herido y lo tenían en el hospital”, asegura un amigo.

Ochoa se encontraba buscando trabajo para poder comenzar una carrera universitaria.



La búsqueda

La Policía adelanta la búsqueda del asesino del menor para capturarlo y ponerlo a órdenes de la Fiscalía y así esclarecer los hechos que rodean el asesinato.

Sincelejo. El crimen de Andris del Carmen Díaz Vides ocurrido antier en la tarde en un prostíbulo de la calle El Cauca, y en el que también fue asesinado Carlos Arturo Martínez Monterrosa, sería pasional. El comandante de la Policía en Sucre, coronel Orlando Polo Obispo, dijo que las investigaciones apuntan a que el crimen estaría dirigido contra la mujer y que lo de Martínez fue casual.

Agregó que el doble homicidio se consumó con un revólver y que están observado las cámaras de seguridad de varios locales del sector, para ver si el agresor quedó registrado.

El hecho

A eso de las 4:00 de la tarde un hombre con casco en la cabeza, ingresó al bar Donde Lucy, en el segundo piso de la carrera 21 con calle 25, entró al baño y cuando salió sacó el arma.

Se conoció que la mujer, que se encontraba jugando cartas con una amiga, estaba de espaldas al asesino y la compañera le dijo "Andris mira", y cuando ella miró al hombre, este le dijo "yo te dije que me la ibas a pagar" y le propinó dos balazos en la cabeza y otros dos en un brazo.

Como Martínez intentó socorrer a la mujer, el sicario le dio un tiro en el tórax. El hombre bajó corriendo y se marchó en una moto donde lo esperaba su cómplice.

Según la autoridad judicial, la mujer registra anotaciones por hurto en Bogotá.

Trascendió que su ex marido es un miembro del Ejército

Consternados

La familia de Martínez está consternada por su partida, puesto que este le había dicho a una de sus hijas que iba hacia el barrio Los Laureles y se dirigió al burdel.

Una de las hijas dijo que una persona que se acercó al lugar y lo vio muerto se fue al barrio Uribe-Uribe donde vivía él y le dio la mala noticia a la familia. Carlos Martínez Monterrosa, era natural de La Cansona, corregimiento del Carmen de Bolívar. Vendía mazorca asada en la esquina de la Dian.

El cuerpo sin vida de Néder Gamboa Montiel, de 30 años, fue hallado en la vía al lado de su bicicleta.

Un manto de misterio cubre el doble crimen ocurrido el miércoles a las 6 de la tarde, en el sector El Terraplén del barrio El Pozón. La Policía no tiene pistas de los autores ni los motivos por los cuales Néder Gamboa Montiel, de 30 años, y Robert de Jesús Arrieta Acevedo, de 12, fueron asesinados a bala.

Las víctimas se dirigían en sus bicicletas hacia la finca Casa Verde, en la que trabajaban, luego de buscar agua potable en otro sector del mencionado barrio.

Cuando se desplazaban por una calle destapada, solitaria y oscura, fueron interceptados, al parecer, por dos sujetos que iban en una moto.

Se presume que el que iba de parrillero le disparó por la espalda a Néder Gamboa, que perdió el control de la bicicleta y cayó al piso.

Al parecer, el sujeto lo remató, ya que la víctima tiene un disparo más en la cabeza y otro en el tórax. El cuerpo sin vida de Gamboa quedó al lado de su bicicleta.



Presenció el crimen

Robert Arrieta fue testigo del homicidio. Se presume que al ver lo ocurrido, el menor se bajó de su bicicleta, saltó una cerca de alambres de púas y corrió hacia una zona enmontada a un costado de la calle. Al parecer, los individuos lo persiguieron y lograron alcanzarlo. El menor, que intentaba escapar en la densa hierba, recibió dos balazos y murió en el sitio.

Las detonaciones alertaron a varios residentes del sector, quienes al salir a ver lo ocurrido hallaron en la mitad de la calle el cadáver de Néder Gamboa.

Uno de ellos corrió hacia la finca Casa Verde, para llevar la mala noticia.

Cuando llegó, María Payares, esposa de Gamboa, estaba en la puerta de la casa. La mujer también escuchó los disparos y temió por la vida de su marido.

Al ver a su vecino, se imaginó que la víctima era el padre de sus tres hijos.

Payares corrió hacia el sitio que le señalaron y encontró a Gamboa muerto. De inmediato, la mujer preguntó por la suerte de Robert Arrieta, pero nadie le dio razón.

Uniformados de la Policía llegaron al sitio, practicaron el levantamiento del cadáver de Gamboa y buscaron al menor, pero no lo encontraron.

Lo hallaron ayer

Con los primeros rayos del sol de ayer, los vecinos del sector El Terraplén, hallaron el cuerpo sin vida del menor, a 30 metros aproximadamente de donde fue asesinado Gamboa. El niño estaba tendido boca abajo y tenía las manos en la cabeza. Debajo del cuerpo encontraron un proyectil de arma de fuego.

Los familiares de Gamboa, que era oriundo del departamento de Córdoba, y los de Arrieta, que nació en Zambrano, se negaron a pronunciarse sobre lo ocurrido.

Se conoció que los allegados a las víctimas les aseguraron a la Policía que no tenían enemigos ni problemas, por lo que desconocen los motivos por los cuales los asesinaron.

La Policía ofreció hasta 10 millones de pesos a quien entregue información que conduzca a la captura de los autores del doble crimen.



Recuadro 1



"Una tumba o la cárcel": Campo Elías Terán

Un ultimátum a los miembros de las bandas criminales (bacrim) y pandilleros armados que siembran el terror en la ciudad envió el alcalde, de Cartagena, Campo Elías Terán Dix, por doble asesinato en El Pozón.

“La Policía ofrece varios millones de pesos a quien nos informe de estos crímenes brutales. Las bandas criminales deben disminuir los asesinatos. A los pandilleros que están armados, les digo que si no se aconductan les espera o una celda en la cárcel o una tumba porque la Policía va a disparar. De eso no les quede la menor duda”, dijo Terán Dix.

Así mismo, pidió a la comunidad colaborar con las autoridades para esclarecer cualquier hecho que anómalo. “Si colaboran habrá justicia”, dijo.



Cinco homicidios

En lo que va del mes de enero, cinco personas han sido asesinadas en Cartagena.

En dos de los casos fueron utilizadas armas blancas y en tres armas de fuego. Los sicarios han cobrado la vida de dos personas.

Las víctimas son: Ángel Peñate Lara, en el barrio La María; Hammer Barrios Rebolledo, en el Líbano; Mauricio Martínez Castro, en Torices y Néder Gamboa Montiel y Robert de Jesús Arrieta Acevedo, en El Pozón.

El Carmen de Bolívar. A las 2:00 de la madrugada del 25 de noviembre, en el barrio Los Laureles, un desconocido asesinó de un balazo en el abdomen a Juan Alberto Márquez Jaraba, de 18 años, cuando departía con unos amigos. Su padre Wilson Márquez acosta relató que su hijo estaba en casa departiendo y de un momento a otro se fue a la otra cuadra donde un desconocido que llegó haciendo disparos lo mató.

"Estábamos acostados cuando sentimos los disparos y la gente gritando, pero creí que se trataba de una pelea, por lo que salí a mirar y corrí hasta donde estaba mi hijo, pero solo alcancé a caminar unos cinco pasos cuando lo encontré tirado en el suelo lleno de sangre y busqué una moto para llevarlo al Hospital", narró Márquez.

Llegó con vida

De regreso vio cuando los amigos lo llevaban al Hospital local, donde llegó con vida, pero minutos después falleció.

El disparo que recibió el joven le perforó el riñón, el hígado y el corazón.

"Llegué a donde mi hijo y él me dijo: 'mami, yo soy el que estoy tirado aquí' y enseguida lo auxilié", expresó adolorida su madre Edelmira Jaraba Quintana. Añadió que su hijo no tenía amenazas.

En el hecho resultó herido Carlos Farid Benítez Castro, de 18 años, con balazos en el brazo y pierna derecha y abdomen, por lo que fue remitido a un Hospital de tercer nivel en Cartagena.

El Carmen de Bolívar. Cuando Armando Rafael Blanco Medina, de 68 años, transitaba anteanoche a las 7:00 por el barrio La Flores, de este municipio, fue ultimado de dos balazos en el tórax. Se dirigía a su casa en el barrio Los Laureles, luego de terminar de trabajar en la ruleta (juego de azar), en el centro de este municipio.

Los familiares de la víctima fueron avisados por personas del sector.

Sin explicación

"Nosotros no sabemos realmente qué fue lo que pasó. Simplemente nos avisaron que mi hermano estaba tirado, herido a bala, frente a la Institución Educativa Las Flores. De inmediato salimos a socorrerlo", dijo Julio Blanco Medina, hermano de la víctima.

Dos tiros en el tórax acabaron con la vida del anciano Armando Blanco Medina.

El herido fue trasladado en una patrulla de la Policía hasta una clínica del municipio, donde finalmente falleció.

Sería por robo

"Cuando llegué a donde mi hermano le encontré los bolsillos del pantalón por fuera, pero tenía la billetera con varios documentos, lo que nos hace pensar que la muerte se trató por un robo, al cual él se opuso. No entiendo por qué el asesino tuvo que hacer eso con mi hermano", expresó el familiar.

Sin amenazas

Otros familiares aseguraron que Armando Blanco Medina no tenía amenazas y no se le conocían problemas con nadie, a pesar de llevar trabajando tantos años en el juego de azar.

No hay alumbrado

Los residentes donde ocurrió el crimen manifestaron que el sector no tiene alumbrado público y en las noches es muy oscuro, razón por la cual no se dieron cuenta de los asesinos.

El sepelio de Armando Rafael Blanco Medina se llevará a cabo hoy.

La Policía del municipio montó un dispositivo de seguridad para dar con la captura de los sicarios.