Los estragos por la temporada de lluvias arreciaron en toda la Costa, debido a que en gran parte de los siete departamentos ayer hubo precipitaciones que se prolongaron hasta por más de cuatro horas.

Atlántico. En la vía Barranquilla-Juan Mina-Tubará-Piojó existen 23 puntos vulnerables que podrían dejar incomunicada en cualquier momento esta zona, informó el secretario departamental de Infraestructura, Juan Pablo Deik.

Expresó su inconformismo por la obra que se realizan en el puente de Molinero, puesto que “la concesión debió construir allí una estructura provisional con el fin de restablecer rápidamente el flujo vehicular por La Cordialidad”.

Entre tanto, en Barranquilla, el aguacero que cayó desde las 6 a.m. hasta las 10 a.m. provocó la caída de seis casas en tres barrios: dos en La Pradera, dos en La Esmeralda y otras dos en Villa del Rosario.

En este último sector, el líder cívico Alfredo Guerra dijo que ocurre lo mismo que en Campo Alegre: una falla geológica viene afectando desde hace tres años cerca de 200 viviendas ubicadas en lo alto de una ladera.

“Hoy (ayer) por fortuna no hubo heridos ni muertos cuando colapsaron las dos casas, pero seguimos en riesgo y exigimos que el Distrito reubique a todas las familias”.

Magdalena. El Banco es uno de los municipios más golpeados del Departamento. Está en emergencia por el desbordamiento del Río, tanto en la parte urbana como en la rural.

La situación tiende a empeorar, ya que las pronósticos señalan que el nivel de las aguas va en un vertiginoso aumento.

El Comité Regional Para la Atención y Prevención de Desastres, Crepad, reportó que diferentes barrios ubicados en zonas aledañas al afluente se encuentran inundados.

Los afectados esperan las ayudas del Gobierno y la entrega de 250 albergues construidos por la Fundación Minuto de Dios.

Cesar. El desbordamiento del río Cesar aisló por completo a una familia de campesinos en la finca Las Garzas, a unos 10 kilómetros de la carretera que comunica a Valledupar con el municipio de La Paz.

10 personas, entre ellas cuatro niños, quedaron atrapadas en medio de la creciente que arrasó con más de 220 hectáreas de pasto. La fuerza de la corriente y profundidad del agua dificultó las labores de rescate que realizó la Defensa Civil.

La emergencia ocurrió a la 1 a.m. de ayer, cuando el río se salió de su cauce e inundó la finca, por lo que sus ocupantes debieron subir a los árboles y al techo de la vivienda, para evitar ser arrastrados por la creciente.

Siete mil damnificados deja el invierno en el Cesar, según el reporte de la Oficina de Prevención y Atención de Desastres.

Bolívar. Las lluvias que se extendieron por más de 36 horas en Cartagena, debido aun frente frío que afecta al Caribe, provocaron la caída de una casa en el barrio San Bernardo, donde 800 familias se resisten a salir de sus viviendas porque, según dicen, no tienen a dónde ir y el Distrito no les ha resuelto su situación.

Señalan que los aguaceros de los últimos días han debilitado los cimientos de sus residencias, por lo que temen que ocurra una tragedia igual a la de San Francisco. “Desde hace 9 años apenas han sido reubicadas 235 familias de las mil que vivimos en esta zona de alto riesgo”, comentó con preocupación Ilario Oviedo, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio.

El Cuerpo de Bomberos indicó que los barrios más afectados por las inundaciones están en los alrededores de la ciénaga de La Virgen, La Candelaria, La Esperanza, El Pozón, Villa Rosita, Las Palmeras, Fredonia y el centro de la ciudad.

Sucre. Las autoridades decretaron la alerta amarilla por el crecimiento de los niveles de los ríos Cauca, San Jorge y Mojana, que ponen en riesgo a cerca de 120 mil habitantes del sur del departamento.

El Cauca empezó a verter sus aguas por el chorro Santa Anita, boquete que abrió en el invierno anterior, y está inundando las zonas rurales de Guaranda, Sucre, Majagual, San Benito y San Marcos.

En la carretera San Marcos Majagual, la fuerza de las aguas causó el debilitamiento del puente El Fuerte, que está a punto de derrumbarse, situación que obligó a las autoridades a suspender el tránsito vehicular. En la carretera Galeras-San Benito, un arroyo arrasó con un puente y dejo incomunicada a una vasta zona agrícola y ganadera.

Córdoba. Un fuerte aguacero que cayó en la mañana mantiene taponada desde ayer la carretera Montería-Arboletes y el Urabá antioqueño, a la altura del puente La Caimanera, en el kilómetro tres. Los campesinos temen que por la debilidad del asfalto, a causa de la inundación, la vía pueda colapsar o partirse en dos, debido a que el agua pasa por encima de la vía.

La emergencia impide el paso hacia los municipios costaneros de Moñitos, Puerto Escondido y Los Córdobas, así como hacia Arboletes, Puerto Rey y Necoclí.

Miguel Narváez, desde el corregimiento Santa Clara, entre Montería y Los Córdobas, reportó que al menos 200 toneladas de plátano están represadas por el taponamiento de la vía. El producto sería llevado a distintos destinos del Caribe y de Antioquia.

Cerca del lugar de la emergencia, la quebrada El Ébano se salió de su cauce en el corregimiento que tiene ese mismo nombre, en jurisdicción de Los Córdobas, y sorprendió a los habitantes de la población desde las 7 a.m. Al menos 240 casas se inundaron, mientras que la creciente se llevó los animales de corral que los campesinos engordaban para la Navidad.

La Guajira. Tres viviendas destruidas y 60 barrios inundados por las intensas lluvias que han caído en Riohacha, es el reporte que entregan los organismos de socorro, que se encuentran en las zonas más críticas atendiendo las emergencias.

Los barrios más afectados son: 31 de octubre, Los Nogales, La Mano de Dios, José Antonio Galán, Las Lomas, San Judas, Villa Campoalegre, Villa Fátima y Barrio Arriba. Los sectores del 15 de Mayo y Bocagrande también sufrieron inundaciones, ya que allí circundan los humedales de la ciudad, donde el agua alcanzó un metro de altura.

Edgar Larios Redondo, Director de Prevención y Atención de Desastres del departamento, aseguró que en este sentido el programa seccional cuenta con la experiencia del año 1981, con el huracán Joan, que afectó los veinte municipios del norte de Bolívar.

Dentro de las estrategias planteadas no se descarta la posibilidad de construir albergues temporales en el departamento de Bolívar, si la temporada de lluvias y huracanes que se avecina azotan a San Andrés Islas y Providencia, y tengan que evacuar a unas 21 mil personas.

Es importante señalar, que estos fenómenos naturales que se forman en el océano o cerca de las costas, dejan a su paso grandes destrozos materiales y victimas por la acción de los vientos y las lluvias fuertes y oleaje por encima de lo normal.

Desde ya estamos mirando los escenarios de afectación y sistema de alertas tempranas, evacuación, operacional, evaluar las capacidades que se tiene como organismo operativo, y debe fortalecerse en las próximas semanas para una atención efectiva, manifestó Carlos Iván Márquez Pérez, Director de Gestión y Riesgos del Ministerio del Interior y Justicia.

Agregó que los departamentos deben poner en marcha las obras menores de mitigación, financiadas por Colombia Humanitaria para ayudar a disminuir los efectos de la temporada de lluvias y huracanes.

Se estableció además que estos huracanes se concentrarán en la costa norte, lo que implica que hay que ponerle mucha atención a San Andrés Islas y Providencia, en la actualidad ya se tiene los planes de contingencias.

En la reunión del comité operativo ampliado que se realiza en el hotel Cartagena Estelar, participan todos los comités de la costa norte, organismos operativos como la Defensa Civil, la Armada, Policía, Ejército Nacional, la Cruz Roja, Bomberos y Corporaciones Autónomas.