Por Emilio Paipa Zárate -

 El sobresalto de la energía eléctrica en el municipio de Plato continúa afectado el comercio de esta zona del Departamento.

"La situación es preocupante porque a diario se presenta el continuo sobresalto en el servicio de energía, causando daño en electrodomésticos, a residencias y el sector comercial" manifestó un propietario de un restaurante en pleno centro de esta localidad.

Los lugareños también señalan que la luz es quitada a cualquier hora del día, esto sin ser avisados previamente.

Los propietarios de restaurantes, hoteles, discotecas y el comercio en general, se encuentran disgustados y a punto de cerrar sus negocios, debido a los daños que han sufrido varios de sus equipos electrodomésticos.

En barrios subnormales, sus moradores no pueden recrearse en horas de la noche porque son presa de ladrones, delincuentes juveniles y algunos "viciosos", que armados tratan de intimidar y atracar a los propietarios de residencias. Varias son las personas que señalan que en los corregimientos ha incrementado la delincuencia, donde el ganado que viene siendo hurtado por una banda de delincuentes, que luego de sacrificarlos los vende al "mejor postor" sin ningún control sanitario.

Los ciudadanos piden incrementar los patrullajes en el municipio en la noche, donde en su mayoría se cometen los hurtos.

Para emergencias, las firmas eléctricas cuentan con subestaciones móviles y cuadrillas de técnicos.

La dura ola invernal que enfrentó el país durante el segundo semestre del 2010, dejó clara la necesidad de emprender programas de emergencia, a todo nivel, para evitar escenas tan fuertes como las vividas por el desbordamiento del Canal del Dique, que causó grandes inundaciones.

Electricaribe, la empresa de energía que atiende a los siete municipiosde la región Caribe, se puso en ‘guardia’ desde ese momento, y en el lapso de un año ha hecho inversiones que superan los 30 mil millones de pesos, en obras para atender urgencias o mitigar daños energéticos, durante la temporada invernal.

“Los trabajos se han concentrado en la subida del nivel de las subestaciones, como el caso de Campo de la Cruz, que se perdió completamente, y tuvimos que hacer una nueva.

Al igual que Gambote, en la que se levantaron muros de concreto, para evitar inundaciones; y en Carmen de Bolívar se invirtieron 4 mil millones de pesos, para mitigar los problemas de erosión, mientras se hace su reubicación en el 2012, una obra para la que se estiman recursos por 15 mil millones de pesos”, dice el ingeniero Rafael Oñoro Acosta, director del Despacho Eléctrico de Electricaribe.

Plan de contingencia

Pero la lista no acaba ahí, pues además de las 130 cuadrillas de emergencia que maneja normalmente la empresa, para enfrentar las fuertes temporadas de lluvias, Electricaribe acaba de implementar otras 37, que se ubican en las partes ribereñas de los ríos y del Canal del Dique, para responder ante cualquier falla que se presente.

“En estos grupos, compuestos por técnicos, tecnólogos, supervisores y hasta ingenieros operan dos o tres personas, completamente preparadas para atender los problemas energéticos de la región”, agrega Oñoro.

Estas cuadrillas se clasifican en las tipos canastas (que son grúas para cuadrar postes), livianas (camionetas con escaleras) y las de las aguas, que a través de canoas se trasladan a esos sitios apartados y necesitados del servicio eléctrico.

“También disponemos de material adicional especializado, para temporadas invernales como la actual. Justamente, hace una semana tuvimos que reemplazar un poste de concreto por uno de fibra de vidrio, en la vía entre Sabanalarga y Manatí (Atlántico), en donde un arroyo se llevó la carretera de la Cordialidad. En ocho horas, los municipios aledaños tuvieron nuevamente el servicio de luz”, dice Oñoro.

La inversión de Electricaribe también contempla la reubicación de redes y la atención de subestaciones móviles, que se trasladan al municipio o lugar de la región que presente fallas en el suministro de energía, a través de camiones o de camas bajas.

Son dos subestaciones móviles una de 60 megavoltiamperio (MVA) y otra de 30 MVA, acondicionadas con transformadores de potencia y equipos capaces de suplir la falla que presente una subestación, sin importar el sitio.

“Estas se conectan a cualquier línea de alto voltaje, entre 66 mil hasta 220 mil voltios, de las que se sacan circuitos y se procede a distribuir la energía en la zona que haya quedado sin el fluido”, precisa el director del Despacho Eléctrico de Electricaribe, quien adiciona que se pueden utilizar en cortos y largos tiempos, todo depende de la reparación.

CODENSA ESTÁ LISTA A ATENDER CUALQUIER EVENTUALIDAD

El Plan de Contingencia de Codensa contempla la ubicación estratégica de móviles de atención, en los municipios con mayor afectación invernal, y la rápida ubicación de los mismos a través de herramientas de posicionamiento global.

“Nuestro equipo de trabajo está preparado para responder ante cualquier solicitud de emergencia reportada por los clientes, y atender oportunamente las diferentes situaciones que se puedan presentar durante las fuertes lluvias”, dice Cristal Otálora, vocera de Codensa.

Para enfrentar esta temporada invernal, la empresa de energía reforzó su capacidad de atención de emergencias, con un incremento del 40 por ciento en el número de agentes que recibirán las llamadas de los clientes, a través de la línea 115.

Además dispondrá de 159 cuadrillas de mantenimiento, que operarán durante las 24 horas los siete días de la semana, y que deben atender los 480 kilómetros cuadrados de Bogotá y 14.500 kilómetros cuadrados de Cundinamarca.

Claudia C. Garcés y José M. Higuera

Funcionarios de la Gobernación pedirán a los hacendados que dejen pasar las nuevas líneas.

Funcionarios de la Gobernación de Bolívar saldrán al campo esta semana para convencer a finqueros de los Montes de María y del norte del departamento de que dejen pasar por sus tierras dos líneas de conducción eléctrica.

Electricaribe construye actualmente dos subestaciones en San Juan de Nepomuceno (Montes de María) y Mahates (norte). También dos líneas de conducción entre San Juan y San Jacinto y entre Mahates y Gambote. La inversión es de 13.800 millones de pesos y los recursos fueron obtenidos por concepto de regalías.

Antonio Rodríguez, gerente de la empresa en Bolívar, explicó que unas 17 mil familias bolivarenses se verán beneficiadas con las nuevas obras. No solo en San Juan y Gambote, también en los municipios aledaños que ya no compartirán energía con estos dos y mejorarán el servicio para sus comunidades.

El directivo contó que si bien las obras en las subestaciones avanzan a buena marcha y estarán listas en nueve meses, se presentan inconvenientes cuando los contratistas que construyen las líneas se topan con dueños de tierras por donde pasarán: no los dejan trabajar en sus propiedades. "Prendimos las alarmas para que el gobernador ayude a facilitar, con estos señores, para que nos permitan pasar", dijo el gerente.

El gobernador Alberto Bernal informó que en los próximos días tres de sus secretarios: del Interior, de Planeación y de la oficina jurídica, con asesores cercanos, acompañarán a los alcaldes de los municipios beneficiados para convencer a los dueños de las tierras de la importancia de estas obras para mejorar el servicio de energía.

"Sería una lastima que este propósito se venga al suelo por la actitud de los propietarios de estas fincas en negarse a dar el permiso por donde se construirán las líneas. El bien general debe primar por encima de los particulares", dijo Bernal.

Federico García, secretario de Planeación, afirmó que en casi la mitad de las tierras por donde van a pasar las líneas los propietarios -que no son muchos, pero tienen terrenos grandes- ponen resistencia.

Algunos hacendados reclaman indemnizaciones. Una opción de los alcaldes, dijo García, será persuadirlos condonándoles deudas pendientes del impuesto predial.

El funcionario sostiene también que hay mucha desinformación sobre el tema, pues si las alcaldías entablan acciones jurídicas seguramente ganarían. Aunque un proceso de estos demoraría demasiado y lo mejor es llegar a un acuerdo cuanto antes para seguir trabajando.

"Vamos a convocar una reunión con los dueños de lotes, parcelas, y de las fincas más grandes, que son con quienes más se tiene inconvenientes. Se va hablar del proyecto, de los beneficios que tiene para la comunidad y a tratar de tocarles sus fibras sociales", concluyó García.