JULIO CASTAÑO - EL UNIVERSAL -La Troncal de Occidente sigue afectada por la naturaleza a su paso por Turbaco.

Nuevamente la carretera Troncal de Occidente fue cerrada debido a una nueva falla en el terreno a su paso por el municipio de Turbaco.

La falla se presentó a pocos metros de donde se había registrado la anterior, la que mantuvo a esa importante vía cerrada por varios días y al tráfico que viene del interior del país circulando por la Variante Mamonal-Gambote.

Ernesto Carvajal, gerente del Consorcio Autopistas del Sol, operador la Troncal de Occidente, tramo Cruz del Viso-Cartagena, dijo a este medio que la falla ya es atendida por los ingenieros y maquinarias que aún permanecían en la zona.

Hoy nuevamente el tráfico que viene del interior del país debe tomar la Variante Mamonal-Gambote, incluido el transporte intermunicipal, aunque la vez pasada, a los buses de Arjona y municipios vecinos se les permitía ingresar por un desvío y pasar por la zona céntrica de Turbaco.

La carretera Troncal de Occidente fue reabierta la noche del lunes de esta semana después de permanecer cerrada durante una semana.

La empresa Hocol iniciará la rehabilitación de la vía que comunica a El Carmen de Bolívar con el corregimiento El Salado, el jueves próximo.

Así quedó acordado entre representantes de la compañía exploradora de hidrocarburos y de la comunidad “salaera”, quienes se reunieron ayer en el restaurante La Mencha, en la cabecera municipal de El Carmen.

Al encuentro también asistieron delegados de la Corporación Autónoma Regional del Canal del Dique (Cardique), Fundación Semana, Gobernación de Bolívar e Instituto Nacional de Vías (Invías), en calidad de garantes del acuerdo.

Hocol identificó 90 puntos críticos en los 19,5 kilómetros que unen a la población con la zona urbana de El Carmen, y anunció que intervendrá 10 kilómetros con material existente y 4,5 con material seleccionado. Además, trabaja para solucionar la movilidad en los tramos El Ojito, La Emperatriz y Las Vacas, todos tres críticos, y priorizados desde antes por los “salaeros”.

El compromiso de la organización, filial de la petrolera Ecopetrol, es dejar la carretera transitable para resarcir el impacto que generó en sus actividades de exploración, cuando introdujo maquinaria pesada en la zona, deteriorando algunos tramos destapados y otros pavimentados en placahuellas.

Lenin Gelvis, ingeniero del Departamento de Vías de GSS, contratista de Hocol, informó que los trabajos en la vía durarán 5 semanas, si las condiciones del tiempo son favorables.

Dijo que el material seleccionado con que se rellenará la trocha será adquirido en una cantera del corregimiento La Cansona, y que también se utilizarán materiales que aportará la misma comunidad.

Acuerdos

Las partes se comprometieron a reunirse para hacerle seguimiento a los trabajos. La primera reunión será el jueves 3 de noviembre.

El Instituto Nacional de Vías (Invías), que tenía previsto arrancar ayer con la construcción de placahuellas en el sector conocido como Bonito (Loma Bonita), pospondrá sus actividades hasta el fin de semana, para facilitar el ingreso de volteos, motoniveladoras y demás máquinas necesarias para las labores de rehabilitación que emprenderá Hocol.

Esta medida además es preventiva, a fin de que la maquinaria pesada que va a ingresar no dañe las placahuellas que harán Invías y la Gobernación de Bolívar, a través del contratista Unión Temporal Montes de María.

Roger Plaza, representante de la Unión Temporal Montes de María, apoyó la propuesta de la comunidad de habilitar un paso por la antigua entrada a El Salado. El propósito es abrir camino por el arroyo Alférez para que pase la maquinaría de Hocol y para que sirva de variante o vía alterna mientras se adelantan los trabajos en el sector Bonito.

La comunidad solicitará a la Alcaldía de El Carmen de Bolívar que controle el tránsito por la vía de vehículos pesados y tractores, con lo que se quiere evitar que se siga deteriorando.

La gente de El Salado, representada por Neida Narváez, presidenta del Comité de Infraestructura del corregimiento, anunció que hará veeduría a los trabajos de Hocol en la vía.

Entrar o salir de El Salado (corregimiento de El Carmen de Bolívar) sin sobresaltos sólo es posible en helicóptero, como lo hizo la gente de la compañía Hocol en su visita reciente, pero al campesinado le toca recorrer a pie o a lomo de burro –si logran sortear los barriales- los 19,5 kilómetros que lo comunica con su cabecera municipal, que puede tardar casi un día.

Así lo manifestó Neida Narváez, presidenta del Comité de Infraestructura de la comunidad “salaera”, en la reunión que convocó la Fundación Semana, en cabeza de Claudia Jaramillo, y a la que asistieron representantes de Invías, Hocol, Acción Social y Cardique, ayer en la Universidad Tecnológica de Bolívar, sede del barrio Manga, en Cartagena.

En ese encuentro se pactaron algunos acuerdos para rehabilitar la carretera, que está deteriorada.

“Estamos incomunicados y desabastecidos. El aislamiento por el mal estado de la vía impide la llegada de los médicos y profesores”, relató la mujer.

La situación –según Narváez– es tan crítica que la ambulancia del centro hospitalario no puede trasladar a los pacientes que son remitidos a El Carmen, debido a que la vía es un lodazal profundo.

“Es triste decirlo, pero nos tocará sacar a nuestros enfermos en hamacas como en el tiempo de antes”, se lamentó Neida.

Ella culpa a Hocol de estropear la carretera mucho más de lo que estaba: “Ellos (Hocol), con su maquinaria pesada la dañaron y la lluvia también ha incidido, por eso estamos incomunicados”.

Los trabajos de Invías

En la reunión intervino la ingeniera Patricia Morales, coordinadora de Red Terciaria del Invías, quien presentó los trabajos que el Instituto hará en convenio con la Gobernación de Bolívar (cuyo representante no asistió).

Recordó que los trabajos están a cargo de la Unión Temporal Montes de María y que el responsable de la Interventoría, adjudicada a la Universidad del Cauca, es el ingeniero Pedro Caicedo.

Las obras cuestan $1.370 millones y la auditoría $130 millones, para un total de $1.500 millones.

Las mejoras a la vía a El Salado consisten en “placahuellas” de cemento de un metro de ancho a cada lado de la vía, suficientemente fuertes como para soportar el tráfico de camperos y de camiones ligeros. Además incluye berma, cunetas y empedrado de un metro de ancho entre las placahuellas, dándole a la vía 3 metros de ancho.

Aclaró que ya no se construirán 2.000 metros como se tenía previsto, sino 1.600 metros de placahuellas, en los lugares que son intransitables sin estas. Los tramos a intervenir son Loma Bonita (600 metros), San Pedrito (580 metros) y Pénjamo (420).

“La longitud se redujo a 1.600 metros debido a que la mayor cantidad de materiales, por la mala calidad del terreno, la hace más costosa”, explicó la funcionaria.

Morales indicó que la obra tiene retrasos porque la Gobernación de Bolívar tardó más de 2 meses en la legalización del contrato, a pesar de tener el dinero recibido desde diciembre.

Dijo que la rehabilitación total de la vía (los 19,5 kilómetros) cuesta casi 8 mil millones de pesos, pero Invías no tiene todos esos recursos. Sin embargo, dejó entrever que es posible adicionarlos a futuro para construir los metros de placahuellas que faltarían para toda la vía.

La Coordinadora de Red Terciaria del Invías advirtió que por las lluvias, los trabajos tardarán meses en ser entregados. No obstante, se comprometió con el contratista (Unión Temporal Montes de María) a intervenir el tramo Loma Bonita (0-600), pues es apremiante utilizar los materiales que ya están en la zona, antes de que las lluvias los dañen.

Los demás tramos serán trabajados cuando la temporada lluviosa dé una tregua, por lo que se presume que la obra será entregada en 2012. El contratista adelanta 22 obras menores de drenaje mediante alcantarillas que atraviesan la vía.

Los cafeteros

Los representantes de la Federación de Cafeteros del Magdalena no asistieron a la reunión, pero enviaron un documento en el que explican a la comunidad las obras que realizarán en la vía.

Esa organización quiere reivindicarse con los “salaeros”, debido a que muchas de las placahuellas que ellos construyeron años atrás quedaron malas.

El proyecto contempla la construcción de 1.300 metros de placahuellas en dos tramos priorizados por la misma comunidad: Las Vacas–La Emperatriz y La Emperatriz–El Danubio.

La Federación se comprometió a contratar para dichos trabajos, 5 obreros no calificados de El Salado con un pago de 25 mil pesos diarios.

Reparos a Hocol

Hocol, filial de la petrolera estatal Ecopetrol, cuya actividad es la exploración y producción de hidrocarburos, estuvo en El Salado varios meses con campamentos volantes e introdujo maquinaria pesada en la zona, deteriorando algunos tramos destapados y otros pavimentados en placahuellas.

Sus representantes se comprometieron en la reunión a dejar la vía en mejores condiciones a la que estaba cuando la utilizaron.

“El compromiso es buscar una solución de movilidad, dejar la carretera transitable”, expresó Guillermina Viuchy, especialista Social de Hocol.

Lo que pretende Hocol es rehabilitar la vía, rellenándola con material granular seleccionado de la misma región, pero esta propuesta fue refutada por las partes que participaron de la mesa de trabajo.

Según Viviana Villegas, miembro del Comité de Infraestructura de El Salado, lo que plantea Hocol es un pañito de agua tibia para todo el mal que le hicieron a la vía.

Patricia Morales, coordinadora de Red Terciaria del Invías, expresó que la propuesta de Hocol carece de especificaciones técnicas y advirtió que la compañía estaría malgastando esfuerzos y recursos en unos trabajos que de poco servirán.

Germán Beltrán, ingeniero civil de Cardique, conminó a los representantes de Hocol a que presenten el lunes próximo un plan de choque de verdad, para dejar transitable la vía.

“El invierno no puede ser una excusa, por el contrario, es una oportunidad para ayudarles a los ‘salaeros’ en su incomunicación”, puntualizó.

Acuerdos

Terminada la reunión quedaron consignados en un acta estos acuerdos:

- El lunes Hocol presentará un plan de choque con especificaciones técnicas claras para rehabilitar la vía a El Salado. Esto será en El Carmen de Bolívar, en el restaurante La Mencha, a las 10 de la mañana. El plan de Hocol será analizado, debatido y aprobado por un comité de seguimiento integrado por Acción Social, Cardique, Gobernación de Bolívar, Invías, Fundación Semana y la comunidad.

- Invías se comprometió a empezar labores en el tramo Loma Bonita (0-600). Anunció que contratará mano de obra no calificada de El Salado, a medida que el proyecto vaya avanzando en cercanías de ese corregimiento.

- Neida Narváez, Viviana Villegas y Claudia Torres serán las interlocutoras de El Salado ante las partes comprometidas con el arreglo de la vía.

        
La empresa Hocol, filial de la petrolera estatal Ecopetrol, tiene un acuerdo con representantes de la comunidad “salaera” desde su llegada al área, en el que se compromete a arreglar los daños causados a la carretera que comunica con El Carmen de Bolívar.

Con campamentos volantes, la compañía de exploración y producción de hidrocarburos estuvo varios meses en El Salado e introdujo maquinaria pesada en la zona, deteriorando algunos tramos destapados y otros pavimentados en “placahuellas”, de los 19,5 kilómetros de la vía, los cuales reparará antes de cerrar sus operaciones allí.

Así lo hicieron constar Saulo Mora, gerente de HSSE de Hocol; Guillermina Viuchy, especialista Social de Hocol; Diana Bermúdez, interventora social de Hocol; y Ostanio Montero Alarcón, coordinador de Desarrollo de la Fundación Hocol, quienes visitaron ayer la sede de El Universal.

Delegados de la empresa se reunirán esta semana con la comunidad “salaera” para definir los trabajos que le harán a la vía. En principio se tiene previsto rellenar la calzada existente y no sujeta a los trabajos de pavimentación mediante “placahuellas” de cemento, con material seleccionado de la región.

La compañía tiene actas viales en las que figuran evidencias documentales, fotográficas y fílmicas del estado de la carretera antes, durante y después de haber intervenido en la zona.

Desde mayo de este año, cuando Hocol se metió de llenó en El Salado, dicen sus funcionarios, ha hecho mantenimientos a la vía con maquinaria de la Alcaldía de El Carmen de Bolívar.

Hocol no se irá de El Salado sin antes resarcir el impacto sobre la carretera, y así se lo informó en una reunión en Bogotá, la semana pasada, a Claudia García Jaramillo, de la Fundación Semana, quien coordina el proyecto de recuperación integral de El Salado en una alianza de varias compañías privadas (entre ellas El Universal), la Fundación y los entes territoriales.

Ante la comunidad, la empresa rendirá un informe pormenorizado de las actividades que allí desarrolló, ya que al emprender el proyecto, en el marco de su política de responsabilidad social, respetan los intereses sociales, culturales, económicos y ambientales del entorno poblacional.

Lo social

Hocol trabaja en los municipios de El Carmen de Bolívar y Ovejas (Sucre) el proyecto sísmico Samán 11-3D. Desde 2006 está en la región montemariana, pero sus actividades se han intensificado en el último año.

En El Carmen de Bolívar, la empresa ha trabajado en la cabecera municipal, El Salado y Arenas del Sur. En Ovejas, en la zona urbana, y además, en Canutal, Canutalito, Loma del Banco, Flor del Monte, El Floral, La Peña, San Rafael, El Lorenzano, Nueva Esperanza, La Cantaleta y Galapa.

Ha hecho una inversión social de 175 millones de pesos en el área del proyecto.

Hocol contrató mano de obra no calificada. De las 325 personas contratadas, 37 son de El Salado.

Al corregimiento le donaron un terreno para la construcción de aulas escolares en la institución educativa pública, a la que también dotaron de electrodomésticos y de elementos deportivos.

          
Tras 9 meses de incertidumbre, por fin se pusieron manos a la obra con la rehabilitación de la carretera entre El Carmen de Bolívar y el corregimiento El Salado.

Desde diciembre de 2010, se le anunció a los “salaeros” que se iban a intervenir los sectores más críticos de los 19,5 kilómetros del carreteable, pero trámites burocráticos demoraron la iniciación de los trabajos.

El Universal supo que hace pocos días fue consignado un anticipo al contratista, posibilitando el comienzo de las primeras labores civiles con la instalación de 70 tubos en 10 cruces de la carretera para la canalización de las aguas.

En total se instalarán 170 tubos en 24 tramos de la vía, indicó Eduardo Guzmán, ingeniero residente de la Interventoría, para después trabajar en su mejoramiento.

Lo contratado

Los trabajos contratados por la Gobernación de Bolívar y el Instituto Nacional de Vías (Invías) están a cargo de la Unión Temporal Montes de María, firma que ganó la licitación en la que participaron otros 6 proponentes, y el responsable de la interventoría, adjudicada a la Universidad del Cauca, es el ingeniero Pedro Caicedo.

Las obras cuestan $1.370 millones y la auditoría $130 millones, para un total de $1.500 millones. Las mejoras consisten en construir “placahuellas” de cemento de un metro de ancho a cada lado de la vía, con parrillas metálicas de 15 centímetros de espesor, suficientemente fuertes como para soportar el tráfico de camperos y de camiones ganaderos. Además incluye berma, cunetas y empedrado de un metro de ancho entre las placahuellas.

Los tramos

El ingeniero Eduardo Guzmán informó que en total se construirán 1.600 metros de placahuellas, en los lugares que son intransitables sin estas, y que ayudaron a seleccionar los propios habitantes de El Salado, los más conocedores del camino y de su comportamiento en invierno.

Los tramos a intervenir son Loma Bonita (600 metros), San Pedrito (580 metros) y Pénjamo (420). Aunque en principio se iban a construir 2.000 metros lineales de placahuellas, se redujo a 1.600 metros debido a lo costoso de los materiales, y esto imposibilitará que se intervenga el sector de la entrada del pueblo hasta el cementerio, que en principio estaba incluido en el proyecto y que es uno de los tramos peores.

Virgilio Girado, ingeniero de la Unión Temporal Montes de María, dijo que el tiempo contractual de la obra es de 4 meses.

“El objetivo es cumplir con esa meta, esperando que las lluvias no compliquen nuestro trabajo”, manifestó.

Veeduría

Luis Torres, habitante de El Salado y miembro de la veeduría de las obras de rehabilitación de la carretera, instó a los contratistas a acelerar los trabajos para recuperar el tiempo perdido.

“Desde julio anunciaron que arrancarían con las obras pero hasta ahora cumplen. Ojalá y terminen rápido, pues se nos viene el invierno y no queremos que sea usado como excusa para dejar todo tirado”, expresó el “salaero”.

Torres dijo que el tramo entre la entrada del pueblo y el cementerio debe ser intervenido, pues así lo priorizó la misma comunidad.

Informó que el Comité de Cafeteros del Magdalena va a rehabilitarse con los saladeros, debido a que las placahuellas que ellos construyeron años atrás quedaron malas.

“Nos han manifestado que intervendrán 1.300 metros en los puntos arriba de la Emperatriz, El Danubio y Loma de las Mellizas. La obra será similar a la que contrataron la Gobernación e Invías con la Unión Temporal Montes de María, y hoy (ayer) tenemos una reunión con ellos para socializar el proyecto”, explicó el veedor.

De otra parte, Luis Torres se quejó del estado deplorable en que quedó la vía luego de que la empresa Hocol ingresara maquinaria pesada y tractores al predio donde exploraban yacimientos de hidrocarburos.

“La vía quedó vuelta nada. Quedó peor que la que teníamos. Sin embargo, Hocol se comprometió a rellenar los huecos que dejó en la carretera”, concluyó. Pero hasta ahora, Hocol no ha hecho nada.

Habla Secretario

Santiago Carrasquilla, secretario de Obras Públicas de Bolívar, reconoció que ha sido largo el proceso para lograr la rehabilitación de la carretera entre El Carmen de Bolívar y el corregimiento El Salado, pero aseguró que nunca hubo negligencia de parte del Gobierno Departamental.

El funcionario afirmó que los fondos para la obra no fueron girados por Invías en diciembre de 2010, aclarando que en esa fecha fue cuando se suscribió el convenio entre Invías y la Gobernación, los cofinanciadores de las obras.

Dijo que en diciembre se hizo un diagnóstico para establecer el estado de la vía y lo que se iba a intervenir, el cual fue desechado, pues las condiciones del terreno cambiaron por las lluvias.

En enero se hizo un nuevo diagnóstico, y en los meses posteriores (enero, febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio y agosto) se hizo la inspección a los tramos para proponer los diseños, la apertura de la licitación, la adjudicación, la socialización del proyecto, la legalización de los predios, el diligenciamiento de licencias, entre otras actividades que sumaron tiempo.

“Muchas de estas actividades son imperceptibles para la gente del común, pero son pruebas de que sí se está trabajando”, puntualizó.

El Batallón de Ingenieros Militares Vergara y Velasco, ejecutor de la Transversal de los Montes de María, tiene previsto entregar el segundo tramo de ese proyecto vial en julio de 2012.

La apertura del carreteable, 17 kilómetros entre los corregimientos La Cansona y Macayepos, avanzan sin contratiempos, favoreciendo el desplazamiento de las comunidades rurales hacia la zona urbana.

El coronel Héctor Moreno Bolaños, director del Proyecto Vial Transversal de los Montes de María, informa que la vía en su segunda fase está terminada en los primeros 10 kilómetros, hasta la vereda Balaustre.

“El tramo 2 está intervenido en un 71%, incluida la instalación de las alcantarillas para el drenaje de las aguas lluvias y la construcción de los puentes en los puntos más críticos”, dice el oficial.

Gestión de recursos

Moreno Bolaños explica que para ejecutar los trabajos en su totalidad se vieron obligados a diligenciar más recursos ante el Gobierno nacional, a través de la Jefatura de Ingenieros y el Fondo Nacional de Desarrollo (Fonade).

La construcción de bordillos y cunetas avanza al ritmo en que es intervenida la vía, de igual forma se realiza la estabilización de inmensas montañas de tierras.

Para la adecuación y funcionamiento de las obras en el segundo tramo debieron realizarse obras de infraestructura en el kilómetro 18, en el que se removieron aproximadamente 4.000 metros cúbicos de tierra, lo que retrasó el avance de la obra.

Para la ejecución del tercer tramo, que va desde Macayepos hasta el corregimiento de Chinulito, en el municipio de Colosó (Sucre), ya se iniciaron los estudios y diseños para iniciar las labores.

Los 2 tramos carreteables que comunican a esa población con las zonas urbanas de El Carmen y de Sucre, están muy deteriorados y eso imposibilita que los campesinos puedan transportarse.

Según Aroldo Canoles Ramos, presidente de la Asociación de Productores Agrícolas de Macayepos (Asopram), las condiciones en que están los macayeperos es preocupante, porque están distantes de cualquier otra población donde refugiarse en caso de una emergencia.

Canoles manifiesta que la situación tiene alarmados a los agricultores, los cuales temen que sus productos se dañen.

“Algunos alimentos ya han tenido que ser arrojados al agua porque se están dañado”, lamenta el labriego.

Asegura que el retorno al pueblo, después de la época violenta de los grupos armados ilegales, ha sido acompañado a medias porque aún siguen sufriendo el abandono de los distintos gobiernos, “los cuales están en la obligación de garantizarnos las mínimas condiciones para tener una vida digna”, dijo.

“En este momento existen 600 familias que desean retornar, pero ni Acción Social y mucho menos Colombia Responde se han podido poner de acuerdo para avalar esos retornos, lo que genera la sensación de desprotección y ausencia de apoyo por parte del Estado”, recalca Canoles.

Por otro lado, afirma que el año pasado a la vía que de Macayepos conduce a Chinulito, en Sucre, le fueron realizados unos pequeños arreglos, los cuales quedaron sepultados durante la ola invernal de 2010.

Las pérdidas

El líder advierte que las pérdidas de productos como ñame, aguacate, plátano, yuca, maíz y cacao ya alcanzan los $1.000 millones, información que es de conocimiento de la Administración municipal y departamental.

Sin salud

Otra de las molestias que manifestó el representante de la comunidad, es la ausencia de las promotoras de salud, quienes estaban asistiendo normalmente al centro asistencial, pero con el aumento de las lluvias no han podido volver a prestar sus servicios.

“Sabemos que existe la voluntad de parte de ellas en prestar sus servicios, pero las condiciones de las vías no se los permite”, refiere Canoles.

La seguridad

El corregimiento de Macayepos está tan olvidado, que la presencia del Gobierno municipal es casi nula. La población tiene miedo a que la recuperación del territorio por parte de las fuerzas militares en el año 2007 se pierda nuevamente.

“En este momento estamos preocupados por los diferentes acontecimientos que se han presentado en el último año en sitios dispersos de la alta montaña, lo que no deja de generar miedo para los que tuvimos la valentía de retornar”, puntualiza.